Virgen de la Aliaga 2007 Imprimir
Escrito por Hector   
Lunes, 22 de Marzo de 2010 16:29

   El aumento de participantes para hacer el Camino de Segura de Baños a la Virgen de la Aliaga es notorio. Este año, que era el camino número 6, habíamos llegado a las 100 personas inscritas, pero el viernes por la noche llegó el agua y continuó lloviendo el sábado, por eso la mayoría de participantes se quedaron en la cama a pesar de sonar los despertadores.

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   Visto el día que hacía, que solamente se oía el agua que bajaba por los canalones de los tejados y caía a la calle, no daban ganas de levantarse, sino de darse media vuelta y continuar durmiendo, y eso es lo que hizo más de uno.

   A pesar de eso, un pequeño grupo llegamos a la plaza de la Iglesia, pero como era imposible estar allí, nos refugiamos en el bar. En este grupo se encontraba Ángel, que vino preparado, ataviado con la ropa propia de un día de lluvia; él nos contó que no le daba miedo el agua, ya que había estado todo el día trabajando con agua y hacer el camino andando no le asustaba, y así convenció a un grupo de jóvenes para que se fuesen a buscar botas, impermeables y paraguas. Esperamos después del volteo de campanas para ver si acudía alguien más o mejoraba el tiempo, pero viendo que el agua no amainaba, fieles a la tradición, comenzaron a caminar doce personas.

   El resto de grupo, al no tener vestimenta adecuada o no acompañarnos tan buena salud, decidimos quedarnos en el pueblo y bajar en coche más tarde con el resto de gente que iba a la Virgen, formando así como siempre una gran caravana de vehículos.

   Debido a la lluvia, el almuerzo con el que obsequia la asociación el Castillo a todos los caminantes, se tuvo que hacer a refugio en una casilla de la desaparecida vía ferroviaria de Utrillas a Zaragoza. Por cierto, que la casilla (como todas) estaba en un estado ruinoso, donde daba miedo meterse, ya que las personas que no respetan lo ajeno las han ido destrozando y es una lástima. Bajé para almorzar con los caminantes y pude comprobar que ir andando era toda una odisea con el agua que caía, menos mal que con el bocadillo, el refresco y el café caliente se reponían fuerzas para continuar el camino.

   Para no perder la costumbre, y aún con barro hasta las orejas, cogieron gamones para demostrar a los de Maicas que los Seguranos hasta con lluvia vamos andando a la Virgen de La Aliaga.

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   Los coches que pasaban preguntaban, y decían que vaya gente más valiente y más devotos para ir andando con el tiempo que hacía y en algunos de los casos les animaban para que continuasen andando.

   El tomillo era muy pequeño debido a la escasez de agua hasta la fecha, pero como con la devoción vale, entregárselo a la Virgen ya colma la ilusión de cada año.

   El caminante de más edad fue Ángel Royo Andreu de 59 años y la de menor edad, de 19 años fue Lorena Gracia Ferreruela, a los que se les entregará un recuerdo por haber hecho el camino andando.

   Los actos litúrgicos que se celebran en el exterior de la ermita fueron suprimidos. Solamente se pudo asistir a la santa misa concelebrada por Pascual y al refresco del Ayuntamiento, que se tuvo que tomar en el interior de la ermita.

   Este año, como siempre, la visita a la Virgen se aprovechó para pedir agua, aunque en esta ocasión el agua llegó antes de pedirla. De todos modos, aunque nos deslució el día se agradeció que lloviera porque hace mucha falta. Segura de Baños es una población ligada al agua desde siempre, y mucho mejor cuando hay en abundancia.

   La ermita estaba más llena que nunca, sobretodo si tenemos en cuenta el día que hacía, pero con esto se demostraron las ganas de los seguranos de acudir a esta celebración.

   Antes de salir para el pueblo, nos despedimos de la Virgen pidiendo que nos proteja durante el año, para poder volver al siguiente, que más de uno está deseando que llegue el momento del reencuentro. Y en medio de la lluvia, volvimos para Segura.

   La comida y dulces típicos que se habían preparado para este día se tuvieron que quedar en casa y compartirlos con los familiares y amigos alrededor de una buena mesa y alrededor de un buen fuego de hogar.

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   Esperemos que el año próximo podamos celebrar todos juntos el día de la Virgen de la Aliaga y volver a hacer el camino andando. Que no falte ninguno de los que hemos ido este año, sino al contrario, que se aumente el número de personas caminantes, que este año habría venido mucha gente que a través de familiares o amigos se habían animado para hacer el camino, pero ya se sabe que contra las inclemencias del tiempo no se puede hacer nada.

   ¡Animaros a venir!

 

Última actualización el Lunes, 20 de Septiembre de 2010 10:40